Las razas autóctonas, como la Gallina Murciana, son pilares vivos de la cultura tradicional que, a lo largo de los años, se transmiten de generación en generación.
Su preservación es crucial no sólo para mantener la biodiversidad, sino también para proteger el legado cultural que representan. Cuando una raza autóctona se extingue, se pierde, también, de alguna manera, una parte irremplazable de nuestra historia y tradición.
En la Región de Murcia, la Gallina Murciana es conocida por su resistencia a muchas enfermedades comunes en otras aves modernas, aunque es vulnerable a patógenos virales y bacterianos durante sus primeros meses de vida.

En Pujante, nuestro compromiso con la conservación de esta raza autóctona se refleja en el trabajo meticuloso del veterinario Juan José García Fortes, especialista en vacunaciones e incubadoras, quien realiza estudios serológicos continuos en la Estación Experimental Agroalimentaria Tomás Ferro de La Palma (Cartagena).
Vacunas personalizadas
Basándose en estos estudios, García Fortes formula vacunas a medida que mejoran la resistencia de los polluelos a enfermedades, visitando mensualmente la Finca Tomás Ferro para administrar vacunas tetravalentes a todos los polluelos recién nacidos.
Estas prácticas han permitido mejorar la viabilidad de los pollitos en incubadora del 40% al 98%.


En la actualidad, la Gallina Murciana, cuenta con sólo 400 ejemplares restantes, por lo que se encuentra en riesgo de extinción. Y para fortalecer sus posibilidades de supervivencia, colaboramos con la Fundación Séneca en investigaciones y tesis doctorales que estudian su crecimiento y promueven su conservación mediante el cruzamiento con nuestra línea de crecimiento lento Pujante + (Plus).
Y todo este esfuerzo garantiza que maximizamos la supervivencia de esta raza durante estos estudios, asegurando la continuidad de su legado cultural y también biológico.

